Es lunes por la tarde, mañana nos regresamos a casa y no quiero dejar de ver de cerca la icónica SIEGESTOR o la PUERTA DE LA VICTORIA.
Caminamos con mi mujer y mi hijo desde el casco histórico o Marinsplat hasta alcanzar la Ludwig Straat, una calle larguísima que sin embargo deja ver en la distancia el tan admirado monumento.
Llevo prisa, dejo a mis lindos acompañantes bien atrás y me voy acercando al gigantesco objetivo. Conforme lo hago un escalofrío recorre mi espina dorsal, sensación que me es muy familiar cuando de portentos históricos se trata. Al fin estoy cerca, al pie del enorme arco que encierra historia, que representa sangre sudor y lágrimas.
Llevo prisa, dejo a mis lindos acompañantes bien atrás y me voy acercando al gigantesco objetivo. Conforme lo hago un escalofrío recorre mi espina dorsal, sensación que me es muy familiar cuando de portentos históricos se trata. Al fin estoy cerca, al pie del enorme arco que encierra historia, que representa sangre sudor y lágrimas.
Un momento me detengo a observarla de todo ángulo como queriendo degluírla con la mirada, como deseando asimilarle todos los detalles y tratando de adivinar su simbolismo estudiado en libros por años, que sin embargo se desvanecen al estar frente al monumental pedazo de historia, al mismo tiempo embebido e incrédulo preguntándole muy dentro de mí..."Será verdad que te estoy viendo..."
Historia-Creador
El monumento fue erigido entre 1843 y 1852 por el arquitecto Friedrich von Gärtner bajo las ordenes del entonces rey Luis I. La construcción de la misma se basa en el conocido Arco de Constantino ubicado en la ciudad de Roma (Italia). En esta oportunidad, el monumento construido rinde un homenaje al ejército bávaro que derrotó a Napoleón, para ello se realizaron detalles de este episodio en partes de la puerta, entre ellas bajorrelieves de batallas y escenas inmortales de dicho episodio de la historia.
Diseño
Siegestor
A parte de rendir tributo a los bávaros, la Puerta de la Victoria detalla algunas de las zonas más importantes de Múnich representadas en figuras alusivas, estas son:
- Alta Baviera: Una granja en los Alpes;
- Alto y Medio Franconia: la artesanía y la ganadería;
- Baja Franconia: Viñedos, cereales y navegación;
- Oberpfalz: El trabajo manual;
- Suabia: Los tejidos.
En la cima del arco hay una estatua que representa a Baviera sobre un carro tirado por leones. Tras su destrucción en la Segunda Guerra Mundial fue reconstruida agregándosele la inscripción Dem geweiht Sieg, vom Krieg zerstört, zum Frieden mahnend (“Dedicado a la Victoria, Destruido por la Guerra, Símbolo de la Paz“).
Ubicación
Dirección: Ludwig Strasse
Al buen rato me repongo, advierto que tengo mi cámara y lo capto desde todo ángulo, sabiendo que a este sitio ya jamás regresaré. Despierto del ensueño y recuerdo que mi mujer y mi hijo se han quedado esperando por mí en un recodo del camino. Ellos se conformaron con ver la PUERTA DE LA VICTORIA dese lejos.
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