El Premio Golden Bell es en el mundo de la educación en California el equivalente al Oscar de la Academia de las Artes y las Ciencia Cinematográficas. Se entrega una vez al año en cada condado, a mentores que, por su calidad de trabajo, han contribuido a la excelencia en educación que ha caracterizado a este estado desde siempre.
Después de haber recibido el premio Profesor del Año del estado de California en 1993 de manos del Gobernador Pete Wilson, a través de su esposa Gail, yo ya no esperaba nada más en mi profesión ya que este premio está por sobre todo.
Sin embargo, cuando en abril de 2005 recibí una llamada del Distrito Escolar de San Rafael preguntándome si aceptaba el premio Golden Bell, por mi trabajo en apoyo extra curricular en la organización, conducción y proyección del Club Latino de San Rafael High School, no pensé dos veces para decir sí, lo acepto con orgullo y humildad.
Después de haber recibido el premio Profesor del Año del estado de California en 1993 de manos del Gobernador Pete Wilson, a través de su esposa Gail, yo ya no esperaba nada más en mi profesión ya que este premio está por sobre todo.
Sin embargo, cuando en abril de 2005 recibí una llamada del Distrito Escolar de San Rafael preguntándome si aceptaba el premio Golden Bell, por mi trabajo en apoyo extra curricular en la organización, conducción y proyección del Club Latino de San Rafael High School, no pensé dos veces para decir sí, lo acepto con orgullo y humildad.
En mayo de ese año, en una ceremonia celebrada en el hotel Emassy Suites de San Rafael, CA, recibía de las manos de la Presidente de la Mesa de Educación de la ciudad, la preciada presea que me hacía formar parte de los privilegiados de la historia del premio en Marin County.
Otro premio que yo no fui a buscar, pero que me encontró con suma facilidad, porque algo bueno debí haber hecho para que otros pensaran que yo me lo merecía.
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