miércoles, enero 17, 2007

ASI ESTA EL MUNDO FACUNDO

Mientras yo camino sin prisa entre el vendaval del mundo, el resto de mis congéneres siguen también sus rutinas, y unos más y otros menos, de la triste barca de la vida, nadie se sale o si lo hace, es para ya no volver jamás.

Por estos días, Fidel Castro tiene en vilo al mundo con su largo adios. Con todo el respeto, admiración y reverencia que me merece el comandante en Jefe, creo que ya es tiempo que descanse. después de haber dedicado hasta el último segundo de su existencia, ya es justo que haga un receso. Si sigue viviendo, bien por nosostros, lo que apreciamos.


En El Salvador siguen las celebraciones del 15 Aniversario de las firmas de los Acuerdos de Paz. La guerra terminó. Ya no hay balazos de guerrilleros a soldados y vice versa, pero las causas que generaron la guerra a fines de los sesentas, siguen ahí como recordando lo inútel que fue la matanza, o quizás recordando que no es suficiente y hay que tomar las armas de nuevo? Quién sabe! Lo que soy yo, repudio esa pesadilla y no quiero saber nada de la raza política que en mi país no deja de ser una retahila de oportunistas queriendo llevar agua para su molino. Derechas e izquierdas, la misma mierda.

En Nicaragua, Daniel Ortega acaba de asumir el mando de nuevo. Muy a pesar de los deseos de Estados Unidos, el cinturón socialista está apretándose en América Latina. Ojalá que sea para el bien de las mayorías populares que merecen un cambio para mejorar sus vidas. Buena suerte al comandante sandinista que esta vez va al frente empuñando la doctrina del amor cristiano a cambio de la doctrina marxista (que no es mala, por supuesto.)

Desde hoy comenzaré a a gregar en mis posts un apartado que lleve el nombre chistoso: ASI ESTA EL MUNDO FACUNDO, que tratará sobre hechos trascendentes que pasen en la historia del mundo ocurriendo al lado de mi historia personal.

Para hacer más interesante mi blog, anoche he incorporado pequeños bloque comerciales de Amazon (y un contador por la curiosidad de saber cuántos entran a leer mis sinsentidos.)

A ver qué tal!

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