lunes, junio 18, 2007

LAS CATARATAS DEL NIAGARA

Esto sólo Dios pudo habérselo imaginado...!



Dos imágenes que me dejaron asombrado al verlas por vez primera: mi mujer y "La Herradura".

Cuando en 1678, el padre Louis Hennepin, el primer "turista" que visitó las Cataratas del Niágara, acompañando a La Salle en su gran exploración de Norteamérica, vio el milagro, escribió con el más increíble asombro "Entre los lagos Ontario y Erie, hay una vasta y prodigiosa cadencia de agua que cae de una manera tan sorpresiva y asombrosa, que no creo que el universo pueda darse el lujo de tener un paralelo".

En efecto, el padre Hennepin no pudo haber hecho una descripción más acertada de lo que ven nuestros ojos frente a este increíble espectáculo de la naturaleza. Al cruzar el puente Arco Iris, que guía a Canadá de la región de Tonawanda, ciudad norteamericana que hospeda la impresionante caída de agua del lado estadounidense en la región de Buffalo, NY, ya se empieza a escuchar el ruido alegre de las aguas que se preparan a caer.


Mi vieja me sigue donde quiera. "Si algo va a pasar, que nos pase a los dos", dice ella.


Al cruzar la frontera de Canadá, el ruido es más perceptible, pero aún no se ven las Cataratas ya que el río Niágara se desplaza potente hacia el oeste, de manera que cruzando el puente estamos atrás de la Catarata. Luego de entrar al Canadá, hacemos una derecha para alcanzar la calle Hiram, luego hacemos una derecha sobre Niagara Falls Parkway que va paralela al río y al lado izquierdo se comienza a dejar ver aquel espectáculo asombroso. Esa caída que pocos en el mundo ignoran y que más de la mitad de la gente del planeta ha podido ver en fotos o videos, pero que al estar frente a ella advertimos cuán cortas se quedan esas imágenes que nos han acompañado por toda la vida.

EL NIAGARA NO ES UN RIO

A pesar de que se le llama "Río Niágara" a esa corta corriente de agua que conecta los dos lagos, esta no tiene la categoría como tal ya que no reúne el requisito de nacer en al tierra y llegar al mar o a otro cuerpo de agua. Esta corriente, nace en un lago y muere en otro lago, por lo tanto no es un río geográficamente hablando. Sin embargo se respeta la terminología que las tribus iroquesas que habitaron la región por centurias le dieron a la corriente.

LAS CATARATAS SON TRES

Dos "caídas" se encuentran del lado estadounidense, puedo afirmar que de este lado se hallan una pequeña y una mediana, esta última se presenta primero a la vista, mide 1060 pies de largo y 176 de alto; 150,000 galones de agua caen a su orilla cada segundo. La "chiquitolina" le llaman "Velo de Novia", por su apariencia y su color, además de la reputación de las Cataratas de ser sitio favorito para canadienses y gringos para pasar su Luna de Miel.

Justo detrás de la Herradura, en el fondo están cayendo 600,000 galones de agua por segundo.

LA HERRADURA

Pero la Catarata más impresionante, la que de veras te deja sin respiración y le das gracias a Dios por haberte dado el sentido de la visión y así poder contemplar tanto portento, es la que se halla del lado canadiense, por su forma y aspecto le llaman "La Herradura" mide de punta a punta 2600 pies y tiene también una altura de 167. De la Herradura caen 600,000 galones de agua por segundo!

La porción más profunda del río Niágara es de 170 pies, la misma profundidad que la distancia que cae.

El veinte por ciento del agua del mundo, cae sobre las cataratas del Niágara. En términos geológicos esta belleza es joven, sólo tiene 12,000 años.

Antes de conocer las cataratas admiraba a gente como "Red" Hill, ahora, después de estar debajo de estos milagros, digo "¿Qué putas estaba pensando ese viejo cuando se tiró en un neumático con el fin de alcanzar un record Guinnes?" Jamás nadie lo ha vuelto a ver.

Como diría mi amigo Julián Monge: "'Tá bueno por pendejo!"

Reafirmo mi comentario: Este espectáculo solo Dios pudo haberlo imaginado!

Al lado de la Herradura. Para bajar aquí te advierten: "lo hace a su riesgo..."

No hay comentarios.: