Pasaba por mi mente todo tipo de pensamiento. Quería inventarme el logotipo y gritar "miren lo que he hecho, soy el non plus ultra de los 'escribidores' en la internet...!"
Saturé mi sitio con todo tipo de artefacto para dar seguimiento a quién entraba y qué leía. Me desesperaba, exhibía, me alegraba, me ahuevaba, me entusiasmaba, me frustraba y me cagaba de envidia porque yo no lo tenía.
Pero una vez que lo logré, me senté frente a mi ordenador, saqué la maleza innecesaria, y dejé lo por mí considerado valioso.
El loguito lo dejé solito y no me importa si me leen o no.
Hoy da gusto ver mi blog!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario