NEW YORK, NEW YORK!

De nuevo en la Babel de Hierro.
El sábado 19 de enero aterrizamos de nuevo en una de mis ciudades favoritas del mundo.

Mi mujer, Doris y Kiarita emergen de la salida de Jet Blue en el aeropuerto JFK.

No veníamos aquí desde junio pasado y sentía que ya habían pasado diez años. Esta ciudad de veras que me encanta. Solo aterrizar en este aeropuerto y ver las primeras calles que te enfrentan a ella, te da la primera señal de que estás en el imperio; hemos llegado de mañanita y nos quedamos un rato en "la durmia" en la terminal de Jet Blue para no despertar a nuestros anfitriones antes de tiempo.


Mi Luchona lista para ir a vagar por esas calles neoyorkinas. Ni el más calador frío la detiene.

Esta vez no acompañan Doris y su hijita Kiara, de vibra positiva extraordinaria. Los próximos dos días los pasaremos en la ciudad más grande del mundo. Hace un frío que penetra hasta el tuétano de los huesos por lo que todo el mundo anda con una tonelada de ropa encima.
Pero qué importa, estamos en New York y hay que aprovechar la estancia para percibir su grandeza y sentir en carne viva la realeza del imperio.


Brooklin, NY, Restaurante Bahia. Una sonrisa de oreja a oreja compartida con Doris Barbieri.

Nueva York, en la Little Italy, un momento precioso...