Es indudable que nuestra región está condenada a sufrir el sempiterno flagelo del bloque en el poder que lucha por mantener sus posiciones de privilegio y de prevendas para eterna memoria.
En Honduras, un intento casi tímido de reforma constitucional ha venido a crear un caos salido de proporciones porque las fuerzas del mal se vieron amenazadas por un fantasma que solo ellos vieron y que fue capaz de remover temporalmente a un presidente que como Mel Zelaya, había sido elegido por el pueblo y que se perfilaba como seguro ganador si una consulta popular seguía adelante.
Las soberanías en todos los países civilizados en donde reina el estado de derecho, radican en los pueblos y su decisión está por sobre la voluntad de indivíduos o gropúsculos que no ven en el estado otra cosa que una máquina de control para sus intereses mezquinos y quienes creen que las leyes están allí para protegerlos a ellos, y para quienes los intereses de las mayorías oprimidas no son un motivante para un cambio.
Por el contrario, ven en la situación del prójimo un designio de Dios por lo que ser extremadamente pobre es una gran ventaja porque los está esperando una riqueza en el cielo que ya la van a envidiar los que se quedan en la tierra. Mientras tanto, aquí en el plano terranal se tendrán que morir de hambre, ese es el alto precio que tienen que pagar por el privilegio del que van a disfrutar cuando se mueran. Qué desgracia que las cosas sigan siendo como han sido desde que tengo uso de razón.
En El Salvador tenemos una derecha astuta que ve con detenimiento lo que está pasando en Honduras para afinar sus armas y seguir el ejemplo si les conviene.
Ojalá que ni se vayan a atrever a mover un dedo en contra del liderazgo actual, porque nuestro país está cerca de Honduras, pero su pueblo está a años luz de distancia en lo que respecta a pelear para defender sus derechos conculcados. La derecha salvadoreña deberá pensar dos veces si tiene en sus planes a corto o mediano plazo, una asonada como la que está ocurriendo en Honduras, porque en esos veintiún mil kilómetros cuadrados cada uno tiene bien claro lo que debe hacer cuando de defender la voluntad popular se trata, ya lo sientieron en carne viva en doce años que hablaron maravillas del pueblo salvadoreño.
Sí, en nuestro país la derecha es inteligente, ni siquiera lo va a intentar.
4 comentarios:
Y se ha dicho mas bien advertido!!!! excelente
Gracias bro!
AC
Americanos,debemos cuidarnos siempre !!!!
Crecer es duro y te lo hacen bien difícil.
Pero a no dejar que las armas sean dueñas
de nustros derechos democráticos.
Saluda desde Argentina Liliana.
Gracias Liliana!
AC
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