INOCENTE ORLANDO MONTANO, militar con manos machadas de sangre, es acusado perjurio en una Corte de Inmigración de los Estados Uidos
AP Martes, 29 de Noviembre de 2011
Un ex militar salvadoreño, implicado de confabulación en el homicidio de seis sacerdotes jesuitas en 1989, fue acusado formalmente el martes de perjurio y falsificación de datos en formas de inmigración en un trámite para permanecer en Estados Unidos.
Inocente Orlando Montaño es uno de los 20 salvadoreños acusados a principios de año en España por los homicidios cometidos durante la guerra civil de 12 años en El Salvador.
El ex militar, de 69 años, ha vivido con su nombre en la ciudad de Everett en el estado de Massachusetts.
El martes fue acusado en una corte federal de Boston de mentir sobre sus antecedentes militares y su participación en la muerte de los religiosos jesuitas con la intención de obtener la situación de protección temporal en Estados Unidos.
De momento no fue establecida fecha para el juicio.
Montaño había negado anteriormente cualquier implicación en los homicidios. Su abogado no respondió de inmediato un telefonema en busca de declaraciones.
Un ex militar salvadoreño, implicado de confabulación en el homicidio de seis sacerdotes jesuitas en 1989, fue acusado formalmente el martes de perjurio y falsificación de datos en formas de inmigración en un trámite para permanecer en Estados Unidos.
Inocente Orlando Montaño es uno de los 20 salvadoreños acusados a principios de año en España por los homicidios cometidos durante la guerra civil de 12 años en El Salvador.
El ex militar, de 69 años, ha vivido con su nombre en la ciudad de Everett en el estado de Massachusetts.
El martes fue acusado en una corte federal de Boston de mentir sobre sus antecedentes militares y su participación en la muerte de los religiosos jesuitas con la intención de obtener la situación de protección temporal en Estados Unidos.
De momento no fue establecida fecha para el juicio.
Montaño había negado anteriormente cualquier implicación en los homicidios. Su abogado no respondió de inmediato un telefonema en busca de declaraciones.
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