



La primera tierra en la que desembarcó Cristóbal Colón en el Nuevo Mundo en 1492 se cree que fue en la isla de San Salvador, llamada originalmente por los arahuacos Guanahani, y posteriormente Watling por los británicos, localizada al sur del archipiélago de las Bahamas. Allí, Colón encontró a los amistosos arahuacos (también conocidos como lucayos) e intercambió regalos con ellos. La posterior desaparición de los arahuacos y de otros pueblos se debió en gran medida a ésta y a posteriores expediciones europeas a la región.
Desde finales del siglo XV hasta el siglo XVII, las Bahamas estuvieron bajo la soberanía española, aunque las islas, por su situación estratégica en la "Ruta del Galeón", y por formar el archipiélago un auténtico laberinto insular, paulatinamente fueron transformándose en escondites y nidos de piratas, bucaneros y filibusteros, especialmente ingleses. Así en el siglo XVIII, los lealistas británicos que habían dejado Nueva Inglaterra, a causa de los sentimientos anti británicos existentes en aquella colonia, se trasladaron a las islas. Debido al gran número de colonos británicos en las islas, la soberanía del archipiélago se traspasó de España a Reino Unido, y las Bahamas fueron declaradas colonia británica en 1783.
En plena Segunda Guerra Mundial, el Duque de Windsor (anteriormente el rey del Reino Unido Eduardo VIII) es nombrado Gobernador General de las Bahamas y viajó a esas islas en compañía de su esposa, la duquesa de Windsor, Wallis Simpson, en 1940 para ejercer ese cargo de Gobernador General hasta 1945. En 1973, los habitantes de las Bahamas votaron a favor de la independencia y se declararon independientes del Reino Unido, aunque permanecieron dentro de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth). Desde su independencia, las Bahamas han prosperado notablemente gracias al turismo, a la banca internacional y la gestión de inversiones.
Nos vemos en cinco días gentes!
Los órganos donados están funcionando correctamente. El equipo quirúrgico... ha trabajado durante un lapso de cinco horas para retirar los órganos enfermos e implantar los órganos donados. Hay que esperar las siguientes 48, 72 horas, que son clave, dijo en conferencia de prensa el doctor Miguel Nicolás, uno de los directores del Hospital Italiano de la provincia de Mendoza, donde se realizó la cirugía.
En el medio pueden ocurrir todas las complicaciones habituales... momentáneamente es importante que sepan que está estable, con una muy buena respuesta a los órganos, agregó el médico. El próximo parte médico oficial se dará a conocer el sábado a las 11 (14.00 GMT), indicó.
Más de 70 personas participaron de la cirugía.
Sandro, de 64 años, padecía de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) y el trasplante era su única esperanza de vida.
Había sido trasladado a Mendoza --1.037 kilómetros al oeste de Buenos Aires-- por la mañana, luego de que aparecieran los órganos.
El gitano, un fumador empedernido cuyo verdadero nombre es Roberto Sánchez, se encontraba internado en una clínica privada de Buenos Aires desde marzo. Estaba en emergencia nacional en la lista de pacientes en espera para un trasplante.
Decenas de fanáticas se concentraron en las inmediaciones del hospital para realizar una cadena de oración por su ídolo mientras duró la cirugía.
En el libro, caín y dios - en minúsculas - hacen un trato y acuerdan que el castigo por matar a abel será vagar por el mundo.
El escritor portugués José Saramago presentó el lunes en Madrid "caín", una mirada irónica sobre el Antiguo Testamento que ha recibido fuertes críticas de la Iglesia Católica y grupos de derecha desde su lanzamiento en Portugal hace dos semanas.
"Yo no escribo para agradar, tampoco escribo para desagradar", explicó el autor, premio Nobel de literatura de 1998. "Yo escribo para desasosegar", explicó.
En el libro, caín y dios - con nombres siempre en minúsculas - hacen un trato y acuerdan que el castigo por matar a abel será vagar por el mundo, con una marca en la frente y sin llegar a morir.
Así, con un tono humorístico, el escritor portugués hace una crítica sobre la obediencia ciega.
"Es cierto que hay un movimiento de "aborregamiento', con perdón, en la sociedad actual, en mi país y en cualquier otro lugar", afirmó.
"caín" sigue la estela de "El evangelio según Jesucristo", de 1991, con el cual el autor revisaba el Nuevo Testamento dándole un nuevo narrador.
Su nueva obra ha provocado una reacción que definió como "muy violenta" por parte de la extrema derecha política en Portugal, aunque según afirmó, quienes critican el libro no habían tenido tiempo de leerla.
"(La principal queja) es que no debería haber hecho una lectura literal en lugar de simbólica", comentó. "El problema es que las visiones simbólicas son muchas", aseveró.
En su primera semana en las librerías portuguesas y brasileñas se vendieron unos 30.000 ejemplares del libro, que ahora se ofrece junto a la Biblia en muchos establecimientos, según indicó un editor de Saramago.
La tirada inicial en español es de 130.000 ejemplares, según la editorial Alfaguara.
El caín de la historia presencia los sucesos del Antiguo Testamento, como la orden a Abraham de sacrificar a su hijo o la destrucción de Sodoma y Gomorra.
"Todos tenemos la obligación de observar nuestra sociedad, una sociedad en la que la violencia está socialmente aceptada", explicó el autor.